De Castejón de Sos a Pedras Blancas
Altimetría Pedras Blancas. Un auténtico ‘puertarraco’ alpino en la comarca de la Ribagorza. «Largo pero duro«, que diría Perico, y además coronando por encima de los 2.300 metros a las faldas del pico Gallinero. Son 1.350 metros de desnivel positivo en algo más de 15 kilómetros de subida. Lo que viene siendo un parque de atracciones para los amantes de los puertos de montaña.
Estás al lado de la población de Castejón de Sos. Castillo de Sos en patués, dialecto de fabla aragonesa que aún se conserva y se habla en el valle de Benasque. La capital mundial del parapente. Si lo que te gusta es volar o quieres empezar a hacerlo, éste es el sitio al que tienes que venir. No he conseguido encontrar el topónimo del pueblo. Supongo que tendrá que ver con algún antiguo castillo en la zona, lo qué no sé y me da curiosidad saber, es porque ‘de Sos’. Si alguien sabe este dato y me lo quiere decir, «prometo estarte agradecido» que diría Rosendo.
El municipio en sí, está integrado por los núcleos de Castejón de Sos, Liri, Ramastué y El Run. Justo en el inicio de la carretera que sube a Liri, comienza el puerto.
La primera parte de la subida se hace pisando asfalto. La carretera (puerto) de Liri empieza en una ramificación del col de Fadas. Territorio carretero brutal el de los puertos de la Ribagorza. Pendiente entre moderada y alta hasta que alcanzas el principio de la pista de Pedras Blancas, antes de los cuatro kilómetros de ascensión.
Aquí es donde empieza el cancaneo, al pisar la tierra. La pendiente pasa a ser alta o muy alta hasta el final del puerto. Después de unas primeras curvas de herradura cementadas muy chulas, y algo de sombra que te va a dar un pequeño bosque, el puerto se abre totalmente. Pedaleas a cielo abierto, lo que se traduce en sudada y de las gordas.
El terreno empieza estando en perfectas condiciones y conforme vas ganando metros va teniendo más ‘pedrusco’. Con gravel creo que se podría subir más o menos bien, pero sufrirías bajando, sobre todo los últimos kilómetros de subida (primeros de bajada).
Estás ante uno de los puertos más duros de Pirineos, un imprescindible. Así que no te queda otra que acercarte a conocerlo, o a sufrirlo. De lo que estoy seguro es de que lo vas a disfrutar, sobre todo cuando lo corones porque ¡no puedes dejar el rock!. ‘Hors Categorie’ y de los gordos.